Cómo robar un millón y... [How to Steal a Million] (1966)
Antes de empezar: ¿eres de los que piensas que William Wyler puede mirar de tú a tú a John Ford, Howard Hawks, Orson Welles, Capra, Lubitsch, o Billy Wilder? ¿O acabas de levantar petulantemente una ceja como queriendo decir "ni en broma, Wyler era simplemente un buen realizador, de esos que solo hacían lo que les mandaba el estudio"? Si ha ocurrido esto último, te alegrará comprobar que no vamos a hablar de ninguna de sus tropecientas obras maestras.
Cómo robar un millón y... (con lo fácil que hubiera sido dejar el título en español sin el "y...") es una de las últimas películas que rodó el maestro Wyler y no, la verdad es que no haría falta hacer hueco en la maleta para llevársela a una isla desierta. Aun así, no creo que le estropee a nadie una tarde tonta de domingo. Ahí están Audrey Hepburn, Peter O'Toole, Hugh Griffith, Eli Wallach (cuyo personaje iba a interpretar George C. Scott, pero fue despedido por llegar tarde el primer día de rodaje), Charles Boyer en un breve papel... Ideal para los que nos conformamos de vez en cuando con pasar un buen rato viendo una entretenida peli en la que aparezcan algunos de nuestros actores favoritos.
A los que sufren delante del televisor cada vez que aparece algo inverosímil en una película les recomiendo encarecidamente que se abstengan de verla. La escena de las llaves en el museo puede perjudicar seriamente su salud.