Conan, el bávaro: ocho minutos de gloriosa comedia
Cosas como esta son las que hacen presagiar, o mejor dicho, aseguran, que el próximo programa de Conan O'Brien en HBO Max marcará otro hito en la carrera del cómico y presentador.
La cuantía de ingenio y alta comedia que ofrece Conan a lo largo de su periplo internacional es descomunal. Decía aquel que no se puede ser sublime sin interrupción, y es cierto, pero es que incluso las partes menos inspiradas de cualquiera de los capítulos de Conan Without Borders contienen, al menos, un puñado de frases o situaciones brillantes.
Italia, Israel, Armenia, Japón, Corea (del Norte), Haiti, Cuba, Ghana, Groenlandia, Australia, Alemania... da igual el que elijas. Uno de mis momentos favoritos de toda la serie es el Conan "aprendiendo" el baile tradicional bávaro, el Schuhplattler, con la ayuda de Franz, Simon, y su padre que, en palabras Conan, tuvo la gentileza de salir de su reloj de cuco para acompañarlos. Todo ello, con la participación especial de Andy Richter. ¡Enorme!