Gilmore Girls: A different kind of truth
Los retornos siempre son complicados y los cuatro episodios que nos han regalado nuestras chicas siete años después no van a ser una excepción. Seis horas de Lorelai, Rory, Luke, Emily y prácticamente todos los personajes de la serie original deberían ser motivo de celebración pero parece que las críticas, sobre todo de los espectadores fanáticos de la serie original, no están siendo muy buenas.
Yo no puedo estar en más desacuerdo. Gilmore Girls: A Year in the Life ha superado todas mis expectativas. Precisamente, lo que parece que más ha molestado a sus seguidores es lo que más me ha gustado a mí; no faltan diálogos vertiginosos marca de la casa que hacen que His Girl Friday parezca rodada a cámara lenta, hay mil y una referencias a todo tipo de clásicos culturales (entre ellas, algunas casi esperadas como Los Soprano, The Wire, El Padrino o Annie Hall y otras deliciosamente sorprendentes: Spinal Tap, El fantasma y la señora Muir) pero el tono general es agridulce y casi sombrío en lugar de alegre y festivo. Un gran acierto.
Al igual que el título del magnífico disco de regreso de la formación original de Van Halen (que también cosechó opiniones encontradas entre sus seguidores), siguen siendo las Chicas Gilmore verdaderas, aunque de un tipo diferente. Ya habrá tiempo más adelante para analizar detenidamente todo lo que ocurre en A Year in the Life sin que esto se convierta en una fiesta de spoilers.
Para acabar, y nunca mejor dicho, una buena noticia: el final deja abierta la posibilidad de seguir disfrutando de nuevos episodios de nuestras chicas favoritas.
Betty
8 años agoPinta bien. Hoy me pondré con al menos el primer episodio aunque tenga que trasnochar.